viernes, febrero 16, 2007

Lula y Pepe, ¿amor o adulterio?

Los conocí hace un par de años en una celebración. Me llamó la
atención la intensidad de su fe, mostrada en la atención y
participación en la eucaristía. Llegado el momento de la comunión,
les pasamos el pan y el vino. La sombra de la duda asomó en su
mirada. Luego de unos segunda, fue Lula quien tomó el pan y la copa
para unirse a la Comunidad en la comunión del sacramento. Se
sentaron en un silencio verdaderamente religioso, se notaba que algo
estaba pasando en sus corazones.

Terminando la celebración, me acerqué a saludarlos. Son esposos
desde hace 25 años – justo los cumplían por esos días – tienen ya
hasta nietos. Nos ha costado estar juntos, sobre todo porque yo era
muy canijo, me dice Pepe, ella me ha aguantado todo este tiempo.

Lula me confiesa: No sabía si comulgar o no. ¿Por qué?, le pregunto;
porque no estamos casados por la iglesia, me responde con un dejo de
tristeza. Ante mi asombro (por su tristeza, no porque no estuvieran
casados por la iglesia, claro) me dijo: Es que Pepe ya se había
casado antes por la iglesia. Lo sospechaba, un caso más de parejas
estables y sólidas que no pueden tener el sacramento del matrimonio
por las reglas actuales en la iglesia. Quedamos de tomarnos un café
y charlar.

Así supe la historia. Pepe se casó a los 19 años con una chica de
18, porque ella estaba embarazada. Al año ya estaban divorciados. La
chica tomó al niño y se fue a vivir a provincia, con unos familiares
y Pepe se quedó solo y de 20 años.

Años después conoció a Lula, se enamoraron, se casaron y tienen una
familia unida, a pesar de las dificultades. Luego de 25 años de
amor, luego de los 5 hijos y lo tantos nietos, el sueño de ambos es
poderse casar por la iglesia, tener la bendición de Dios, porque
estamos viviendo en pecado.

Caray, que extraña es la doctrina de la iglesia. Mi primo (que es un
cabezota) tuvo dos mujeres y dos hijos en el transcurso de varios
años; luego, cuando decidió sentar cabeza, se consiguió otra mujer,
se estableció con ella y se casó por la iglesia sin problemas ya que
en las anteriores relaciones (a pesar de los hijos) no había un
matrimonio religioso.

La iglesia bendijo el matrimonio de un hombre que dejaba atrás dos
parejas y dos hijos abandonados como si ninguna de esas relaciones
no hubieran sido importantes, al mismo tiempo que negaba la
bendición a una pareja que daba claras muestras de un amor estables
y sólido, solo porque un joven de 19 años se había equivocado al
casarse a esa edad.

Así tenemos parejas de creyentes que son obligados a abandonar la
eucaristía en sus comunidades para irse a vivir a de incógnitos para
evitar el escándalo de los fieles, sin reconocer que a los fieles
poco nos importaría que una pareja con 25 años de amor se les diera
la comunión, aunque no haya boda religiosa.

No estoy diciendo que hay que casar a la gente a tontas y a locas,
pero creo que nos hace falta un serio discernimiento para dar una
respuesta más humana y más cristiana a la realidad de muchas
personas que quieren celebrar la bendición de su amor y no pueden
hacerlo.
¿Es la ley eclesiástica el último criterio? La teología del
sacramento del matrimonio ha cambiado en el transcurso de los
siglos, ¿será que no puede cambiar para dar cabida a otras opciones?

¿Podríamos reconocer una nulidad automática del primer matrimonio
(sin pagos, sin investigaciones, sin burocracia) para quienes
muestren años de vida común, de amor sólido con su segunda pareja?

¿Podríamos separar el sacramento del matrimonio de la vida común de
las parejas jóvenes, celebrando un rito más sencillo de bendición de
la pareja cristiana, dejando el sacramento para cuando la pareja
esté sólidamente establecida?

¿Podríamos reconocer a las personas, sobre todo a los jóvenes, el
derecho a una segunda oportunidad?

En, fin, mientras no seamos capaces de abrirnos a la realidad y
responder a ella de forma creativa y comprensiva, seguiremos
acusando de adulterio a las personas que se aman, como mis amigos.



J. Álvaro Olvera I.
Comunidad Católica Vino Nuevo

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy buenos los temas que pasan
sigan haciendolo; pues ya que hay mucha necesidad de información